lunes, 27 de diciembre de 2010

Nacida entre dos ríos: Mesopotamia



  Entre los ríos Tigris y Éufrates se encuentra la región de Mesopotamia, cuyo nombre significa en griego, precisamente,  entre ríos
   Es en esta zona donde nacen las primeras ciudades (IV milenio a.C., aproximadamente), debido sobre todo a su terreno fértil y a una climatología favorable. De esas ciudades destacaron algunas como Uruk, Babilonia o Ur, considerándose ésta última como el lugar de origen de la primera escritura cuneiforme. Todas ellas se caracterizaban por sus complejas organizaciones sociales, las sociedades eran militarizadas y la vida se organizaba alrededor de los templos y/o de los palacios; tenía gran importancia la figura del sacerdote-príncipe.
     De los distintos pueblos que se establecieron en esta zona, uno de los más antiguos era el de los sumerios, que se asentaron en el sur de la región. Éstos vivían en ciudades-estados independientes, dirigidas por un soberano que cumplía el doble papel de dios en la Tierra y, a la vez, el de máximo representante sacerdotal.  En la zona sur se encontraban los acadios, mientras que en la norte estaban los asirios; el poder de estos estados militares lo ostentaba un monarca autoritario. Posteriormente, se formarán poderosos imperios como el persa (actual Irán) y el babilónico, cuyos estados se organizaban de una manera más centralizada y perfeccionada. Mesopotamia también destacó por ser una de las regiones en las que aparecieron las primeras leyes escritas.

    En cuanto a la religión, ésta era politeísta. Algunas de las divinidades más importantes fueron: Enlil, el llamado rey de los dioses; Adad, el que controla el tiempo, las tormentas y las lluvias, y cuyo animal representativo es el toro; Enki, considerado el más inteligente de los dioses, llamado maestro de la técnica y al que se le atribuye la creación de los seres humanos a partir de la arcilla; Ishtar, diosa del amor y de la guerra, representada a menudo con un arco; Mardouk, dios protector de Babilonia, el cual pasa con el tiempo a ser el nuevo rey de los dioses y sustituto de Enlil, además de ser el hijo del dios Enki y el creador del Universo, etc. Por otro lado, se considera que los dioses nacieron de la unión de dos seres: Apsu, el agua dulce y elemento masculino, y Tiamat, el mar y el elemento femenino.  
    
 El Arte Mesopotámico.

     En la cultura mesopotámica, el arte se caracterizó por estar muy relacionado a la política, ya que con frecuencia se solía usar para representar el poder del soberano y las leyes que éste promovía. 
     Centrándonos en la arquitectura, los mesopotámicos usarán un material sustituyente a la piedra (ya que este material escaseaba en la zona): la arcilla, la cual emplearán en forma de bloques secados al Sol (adobes), o cocidos a altas temperaturas (ladrillos) Gracias a las características de este material, se crearán los primeros arcos, lo que ayudará a la formación de cubiertas curvas, las bóvedas. Como novedad, y para decorarlos, se revisten de ladrillo vidriado de diferentes colores. 
      El templo y el palacio real serán las construcciones más importantes. En el caso del primero, en él se llevaban actividades de tipo religiosas, políticas y económicas; se trataba de un edificio con una alta torre escalonada, de planta cuadrada o rectangular y con paredes en talud sobre las que se elevaban terrazas cada vez más pequeñas, a las que se accedía mediante rampas; finalmente, la estructura se culmina con una especie de capilla, la cual se cree que servía como observatorio astronómico. A todo este conjunto se le llamaba zigurat, siendo un ejemplo del mismo el que se conserva desde finales del III milenio a.C. aproximadamente,  el zigurat de Ur (Sumeria), de planta rectangular con tres pisos, construido en adobe y recubierto por ladrillo cocido; otro ejemplo conocido es la llamada Torre de Babel o Babilonia que se menciona en la Biblia. 

    En cuanto a los palacios, hay que destacar la contínua y creciente evolución que sufrieron debido a los diferentes cambios de culturas y pueblos que hubieron en Mesopotamia. Con ellos los soberanos querían manifestar el poder y el dominio que poseían. Un ejemplo de estos edificios es la residencia real de Persépolis (518 a.C., aproximadamente), en la que destacaban sus grandes espacios representativos, como la sala de audiencias o apadana, donde el monarca recibía a personas importantes que venían de otros lugares.  
        Los conflictos entre los pueblos mesopotámicos eran bastante 
frecuentes, con lo que otro de los elementos de las ciudades que sobresalían eran sus murallas. Se suelen destacar las de la ciudad de Uruk, que son nombradas en el Poema de Gilgamesh, donde se narra la vida de este legendario héroe, al que se le atribuye la edificación de dichas murallas. También  se le daba mucha impotancia a la puerta de acceso de las murallas, destacando la magnífica decoración que presentaban. Gran importancia tiene en este sentido la llamada Puerta de Ishtar (Babilonia), del siglo VI a.C. aproximadamente, decorada con cerámica vidriada policromada y figuras en relieve que eran toros y dragones, considerados como protectores, y que representan al dios Mardouk. Otras estructuras conocidas de la ciudad babilónica son los famosos Jardines Colgantes, que en su momento eran considerados como una de las Siete Maravillas del mundo antiguo.

        En cuanto a la escultura, se usaron materiales como la arcilla, la piedra y la cerámica vidriada, Se caracterizaban por su rigidez, su forma de boque y su tamaño pequeño, representándose sobre todo a dioses, sacerdotes y reyes. Un ejemplo es la representación del monarca Gudea de Lagash (Sumeria), de finales del III milenio a.C., en la que aparece vestido con una toga y un bonete, y con las manos juntas sobre el pecho. También destacaban los relieves, los cuales decoraban las paredes de importantes edificios o las superficies de estelas de piedra, donde se grababan acciones militares destacadas, o incluso leyes, como es el caso del Código de Hammurabi, considerado como la primera ley escrita que existe de la humanidad; cacerías, combates o rituales eran otros motivos que se solían también usar. Muy representados tanto en esculturas como en relieves también fueron los famosos toros alados, seres mitológicos con cabeza de hombre, cuerpo de toro y alas.


Y por si quieren saber más:

http://www.mesopotamia.co.uk/index.html

http://www.proyectosalonhogar.com/Civilizaciones/Civ_Mesop.htm

http://www.icarito.cl/enciclopedia/articulo/segundo-ciclo-basico/educacion-artistica/artes-visuales/2009/12/367-4009-9-el-arte-en-mesopotamia.shtml





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